Y si Superman recibe azotainas, Batman pone sobre sus rodillas a Robin. Esta escena es, como las portadas anteriores, del comic original:
lunes, 24 de agosto de 2009
Superzurras
Y si Superman recibe azotainas, Batman pone sobre sus rodillas a Robin. Esta escena es, como las portadas anteriores, del comic original:
domingo, 16 de agosto de 2009
El ángel azul y Curso de 1999
Me quedaban un par de escenas de spanking de mi colección por compartir con vosotros. La primera es muy antigua, se trata de El ángel azul, la película de Josef Von Sternberg que dio a conocer a Marlene Dietrich en los años 30. Hay una escena de internado en la que unos bachilleres ya mayorcitos se vengan de un compañero asaltando su cama y zurrándolo. Antes del asalto, hay un guiño o una parodia de otro clásico alemán, Nosferatu de Murnau.
La segunda escena es de Curso de 1999 (1990), una serie B segunda parte de otra serie B llamada Curso de 1984. Seguimos a vueltas con escuelas y alumnos; en esta ocasión los chavales son tan rebeldes que se recurre a un profe robot para poner orden. El profe biónico tiene una gran fuerza en las manos y no se cansa nunca, como comprobarán los culetes de dos chicos menos educados de lo que deberían.
jueves, 6 de agosto de 2009
Un aviso y una película antigua
Dado ya el aviso, os pongo el vídeo de una película antigua con una de las escenas de azotes más destacables que he visto entre hombres adultos. Se trata de un título bastante ignoto de los años 30, Mystery ranch, protagonizado por una estrella de la época, un tal Tom Tyler, un tio muy guapo especializado en papeles de machote, digamos que una estrella del cine de acción de su momento.
La peli es un western en el que los propietarios de un rancho se divierten gastándole bromas a nuestro héroe. Lo hacen enfrentarse con unos ladrones (o algo así porque tampoco es que le hiciera mucho caso al argumento) que en realidad son empleados que están representando ese papel; el chico, al ver que le están tomando el pelo, opta por darle una buena azotaina a uno de los supuestos forajidos, mientras el otro escapa por piernas para librarse de tener el mismo destino. Yo desde luego no habría escapado ...